La hiperinflación ha estado presente en varios países del mundo y en distintas épocas de la historia.

Técnicamente, uno de los síntomas aceptados por la mayoría de los economistas, es observar una inflación mensual igual o mayor al 50% y una acumulada anual de más de 12.000%.

En Venezuela, al momento de escribir este artículo, las cifras más confiables reportan una inflación mensual para mayo 2018 de 110,1% y una tasa anualizada con respecto a mayo 2017 de 24.571%.

De hecho, dentro de los episodios latinoamericanos, acabamos de pasar al peor de la región que hasta ahora pertenecía a Nicaragua.

Peores casos de hiperinflación del mundo

Existen varios países que han sufrido este mal a través de la historia. Entre los más críticos se encuentran los episodios de Alemania, Zimbabue y Hungría.

En Alemania, las personas hacían cosas como utilizar el papel moneda para tapizar las paredes o para quemar en sus chimeneas y protegerse de las bajas temperaturas.

Para noviembre de 1923, si deseaban adquirir un dólar, debía pagar aproximadamente un trillón de Marcos Alemanes.

En el caso de Zimbabue, la hiperinflación comenzó a mediados de 2007, y creció exponencialmente en tan sólo un año. Según cálculos del Fondo Monetario Internacional, la moneda del país perdió el 99,9% de su valor.

Para finales de 2008, una rodaja de pan costaba lo que equivaldría a 12 carros nuevos hace diez años.

Y finalmente el caso no tan famoso de Hungría. Para el período entre 1945 y 1946, el nivel de inflación tuvo que expresarse en notación científica, 3×1025, y definitivamente algo muy malo está pasando si debes usar esa escala para los niveles de economía.

¿Enemiga o aliada?

En entornos de hiperinflación, proyectar o predecir se vuelve casi imposible. Sin embargo, se puede tomar nota de los resultados en todos los países que han pasado por este escenario.

Varios economistas no condenan de manera definitiva al fenómeno de hiperinflación, pues según ellos, es el síntoma más notorio y relevante de proceder con un ajuste macroeconómico.  En tal sentido, los cambios resultantes de procesos hiperinflacionarios son fuertes y tienen 2 versiones: Un ajuste gradual o un denominado shock económico.

El resumen de las medidas que son adoptadas en tema de ajustes por países han sido los siguientes:

– Reducción del déficit fiscal.

– Nuevas políticas cambiaras.

– Financiamiento de organismos internacionales.

– Privatización de empresas del estado.

– Ajustes de precios de servicios públicos.

Los lapsos en promedio más largos de duración de países en entornos de hiperinflación, van desde los 6 hasta los 18 meses de alzas sostenidas de precios.

En algunos de estos países se ha intentado realizar reconversiones monetarias, cuyos resultados no fueron exitosos, hasta el punto de recordar el caso de Zimbabue donde en todas sus reconversiones realizadas le quitaron el total de 26 ceros a su moneda.

Independientemente de la tendencia política del gobierno nacional, el ajuste de medidas macroeconómicas viene en camino. No se puede estimar una fecha exacta para la realización de las mismas, entre tanto el consejo es revisar continuamente sus finanzas personales, obtener múltiples fuentes de ingreso y cuidar al máximo su patrimonio, en caso de no conocer a fondo el tema de finanzas recomendamos busque el consejo de profesionales.