Ha inicios de pandemia, el Fondo Monetario Internacional hizo la previsión de que la economía quizás caería entre 2 o 3 puntos porcentuales, sin embargo, actualmente esperan una caída casi del 5%, lo que deja en evidencia la difícil tarea que llevarán a cabo los diversos gobernantes, responsables de crear políticas monetarias y financieras que permitan la recuperación individual de la economía de cada país y restaurar el apoyo que siempre se han dado en sus mejores épocas de bonanza.

La pandemia continúa generando incertidumbre y desasosiego en la sociedad, así como en las empresas dedicadas a todas las ramas laborales, las mismas, encargadas de mantener la productividad económica de cada país se encuentran en una lucha titánica por mantener sus puertas abiertas sin perder espacios como sucursales ni talentos humanos como embajadores de su trabajo.

El Fondo Monetario Internacional prevé que incluso cuando las economías reabran será una recuperación prolongada y desigual en la medida que los casos de Covid sigan siendo positivos y los empresarios continúen temerarios a reabrir sus puertas. Tan solo en EEUU en un día fueron confirmaron 35.000 casos, esta cifra es el tercero de los totales más altos desde el inicio de la pandemia, así como EEUU son muchos los países que están experimentando nuevos brotes y se han visto en la necesidad de retroceder en el levantamiento de las medidas de confinamiento, esto por supuesto limita a la economía del mundo. En abril el fondo monetario internacional hizo la predicción de que la economía mundial sufriría una recesión de un máximo de 3 puntos porcentuales, sin embargo, es actualizaciones recientes comunicaron que esperar cerrar el último trimestre del año 2020 con 4.5 puntos porcentuales, ésta predicción está siendo cumplida de acuerdo a El País Financiero, en donde se observa a los países indicando sus recesiones de manera individual.

Aun cuando algunos sectores económicos empiezan a reabrir, las medidas de distanciamiento social y los horarios establecidos han causado estragos en el rendimiento de los comercios, además de significar grandes gastos inesperados, muy difíciles de costear en la actualidad donde se percibe una menor cantidad del ingreso y se mantienen las mismas obligaciones laborales como el pago de los salarios y el cumplimiento de los impuestos , esto se traduce a que habrá sin dudas una recuperación mucho más lenta de la esperada por lo cual además de provisionar la recesión.

El Fondo Monetario Internacional también proyectó un crecimiento global del 5.4% adentrando el año 2021, proyección que tuvo que ser modificada y ajustada a las últimas actualizaciones de casos confirmados.

Las pérdidas a nivel mundial se estiman alrededor de 12 billones de dólares, sería la primera vez desde 1870 que tantas economías experimentan una caída sin precedentes como la que estamos presenciando en este año 2020. Las caídas más pronunciadas han ocurrido sin duda en aquellos países con una mayor afectación de casos por el Covid-19 y por supuesta aquellas que dependen de un comercio internacional o de un turismo clasificado como primera generación.

Sin duda el 2020 es un año histórico lleno de lecciones humanas vitales quizás para poder continuar y tener fieles convicciones de que el año entrante no será sencillo, pero estará lleno de prioridades distintas que preservar.