Las mejores oportunidades nacen en épocas de crisis, una gran frase que no es excepción para esta organización, AIESEC se estableció en 1948 después de la Segunda Guerra Mundial, donde siete jóvenes de siete países tenían el sueño de construir un entendimiento intercultural entre las naciones.
Una gran idea, un poco visionaria, pero con trabajo fuerte y sin perder el norte, en 1977, AIESEC estaba presente en 50 países en 6 continentes, hasta la fecha, más de 40.000 jóvenes de todo el mundo habían participado en una experiencia de desarrollo de liderazgo y pensar que todo surgió con una pequeña idea.
Entre estos grandes jóvenes en todo el mundo se encontraban personajes célebres como Bill Clinton pasando por Mick Jagger y todos esos héroes anónimos que aportan su talento, visión y le dan un propósito a sus vidas y a ser parte del cambio.
En 2010, AIESEC atraviesa 10.000 experiencias entregadas en un solo año por primera vez. En la actualidad, se han proporcionado más de 230.000 experiencias, todas ellas facilitadas por jóvenes para jóvenes.
Desde el primer momento que un joven ingresa a la organización comienza a adquirir nuevos conocimientos, conoce sus capacidades y asume retos que desafían su intelecto, en AIESEC nadie juzga, ahí te motivan, apoyan e impulsan a ser mejor.
Los líderes juveniles de 126 países y territorios de AIESEC, han permitido desarrollar el talento humano, empoderar a los jóvenes a asumir cargos de liderazgo y convertirlos en agentes de cambio, con un objetivo principal, alcanzar la paz del mundo. Todo esto suena bastante fantasioso y poco accesible, pero sí, es posible para cualquier persona que forme parte de AIESEC.
Los miembros, brindan trabajo voluntario para llevar a cabo ciertas tareas que van a garantizar la sustentabilidad de AIESEC y el desarrollo efectivo de los programas que se ejecutan en el mundo, impactando de manera positiva a la sociedad.
Voluntario Global y Talento Global son los programas de impacto social que se ofrecen a jóvenes que estén dispuestos a salir de su zona de confort y encontrarse con otra cultura, ya que deben trasladarse hasta otro país durante algunas semanas y participar en un proyecto que les permitirá buscar soluciones a una problemática a través de sus conocimientos. Al regresar, esos jóvenes vendrán cargados de nuevas experiencias que lo hicieron crecer como persona y profesional, asumiendo el compromiso de aportar un granito de arena por lograr tener un mejor país. Los AIESECos han entendido que cambiar el mundo significa cambiarse a sí mismo.
En resumen, AIESEC es una red global de personas que simplemente creen que el liderazgo juvenil no es una opción, sino nuestra responsabilidad.